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Dando vueltas de vuelta, qué no valga la redundancia

  • Foto del escritor: Emiliano Damonte
    Emiliano Damonte
  • 22 abr
  • 3 Min. de lectura

No fue sencillo juntar masa crítica para escribir estos días, y no lo ha sido porque no pasan cosas nuevas. La exigencia de una tira diaria en radio te deja frente a este hecho contundente: todo sigue más o menos igual de mal, pero con otro acompañamiento de fondo, o con otro acompañamiento de Fondo; se murieron Jorge Mario Bergoglio y el Loco Gatti y por algún extraño milagro de la política parece que va a haber números para que el Senado vote Ficha Limpia, finalmente una, indiscutible, para el lado de la justicia.


Un arquero y un Papa
Hugo Orlando Gatti y Jorge Mario Bergoglio

Dando las mismas vueltas de siempre

El campo se apura a liquidar soja antes de que baje el dólar y suban las retenciones, y otra vez el motor productivo de este país cuentero pone el hombro. Porque a los 20.000 millones que entrega el fondo se sumarán varios miles de una buena cosecha, que no encontró precios extraordinarios, pero que por abundante terminará siendo sólida y dando una vez más seguridad a un sistema que le promete gloria y honor en un futuro brillante que algún día llegará. Al campo no le importa demasiado esto, dotado por la Divina Providencia de ventajas comparativas tales que le han permitido sobrevivir a todo y a todos, incluso entregándole al Estado el 58% de lo que le entra. 


Nada nuevo, pero nada. La misma película de cada misión heroica que va a pedirle guita al fondo mientras la oposición los acusa de vender la Patria para luego ir a pedirle guita al Fondo cuando sea oficialismo mientras la oposición los acusa de usarla para hacer populismo. Las bolas al plato de este país que se limpia el culo con la producción, de cualquier tipo esta sea, única fuente de riqueza posible, si de hablar de economía se trata. Por eso está difícil hablar de algo en estos días que no sea la cotización del dólar que está bajiiiita justamente porque detrás hay muchos dólares prestados y una buena cosecha de un sector que se ve perjudicado por esta cotización bajiiiita que decide simplemente aceptar antes de que sea peor y vuelvan a subir las retenciones y a la complicación de esa cotización bajiiiita se le sume la vuelta de esos 4 miserables puntos que les habían bajado con el título de “se terminaron las retenciones”. Y todo seguirá girando, y las PyMEs sufriendo y cerrando, y los pequeños productores rurales arreglandoselas, y las economías regionales haciendo malabarismos, como siempre, al menos hasta ahora. Si lo que escribo suena redundante sepan, que esta vez, solo esta vez, no soy yo el redundante sino la realidad argentina. 


Se fueron el Papa y el Loco

La muerte de Francisco y la del Loco Gatti ya nos distrajeron, y no es para menos. 

Jorge Bergoglio es probablemente el argentino más importante de la Historia, guste o no. Un tipo que tuvo algo que decir y lo dijo desde la caja de resonancia más potente y antigua de Occidente. Un cura que se ensució la sotana en la calle. Mi anticlericalismo y mi gorilismo me impiden ir mucho más allá en el elogio, pero sin dudas se fue un tipo distinto. 

El Loco Gatti fue otro distinto, enorme personaje, gran arquero, ídolo popular respetado y querido por muchos, menospreciado por otros, como corresponde a los ídolos que suelo poner en mis pedestales. Los boludos que se enojan por sus declaraciones deberían escucharlo decir sobre él mismo que “se hizo famoso por decir boludeces”, provocando siempre, atajando las más difíciles y comiéndose algunas de las más estúpidas, humano, falible, fanfarrón maravilloso. Y aparte de Gorila soy Gallina, que no haya dudas a cinco días del superclásico. 


Sorpresa con Ficha Limpia?

Ah! Y parece que los senadores del santacruceño Vidal van a dar los votos que necesita Ficha Limpia para ser ley… esperemos no ilusionarnos al cuete. Pronto deberíamos tener sesión en el Senado para decidir finalmente que chorros y corruptos no pueden acceder a cargos públicos. Tal vez así podamos empezar a levantar la puntería sobre las reformas reales que necesita este país finalmente.  


Salutación

Mientras tanto amici miei, incomodidad, espíritu crítico, acidez estomacal, que se les rompa el sillón, el banquito o la reposera (siendo invierno que se les vuele el poncho), les auguro dolor de ancas e inflamación del ciático para que no se queden tranquilamente sentados en los miedos del pasado, los relatos del presente y las promesas del futuro, y más que nunca: solidaridad, empatía, respeto por la dificultad del otro, generosidad y paciencia, espíritu crítico que más no se pueda, ojos abiertos y equilibrio emocional, les augura El Aguijón. 


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