Beirut, 27 nov (Reuters) – Un alto el fuego entre Israel y el grupo armado libanés Hezbollah entró en vigor el miércoles después de que ambas partes aceptaron un acuerdo negociado por Estados Unidos y Francia, una rara victoria para la diplomacia en una región devastada por dos guerras durante más de un año.
El ejército libanés, encargado de garantizar que se mantenga el alto el fuego, dijo que se estaba preparando para desplegarse en el sur del país. El ejército pidió a los residentes de las aldeas fronterizas que retrasaran el regreso a sus hogares hasta que se retirara el ejército israelí, que ha librado una guerra contra Hezbollah, respaldado por Irán, en varias ocasiones y se ha adentrado unos 6 kilómetros en el Líbano.
Aunque el alto el fuego se mantuvo en gran medida el miércoles por la mañana, Israel dijo que identificó a agentes de Hezbolá que regresaban a zonas cercanas a la frontera y que había abierto fuego para impedirles que se acercaran.
El acuerdo, que promete poner fin a un conflicto en la frontera entre Israel y el Líbano que ha matado a miles de personas desde que se desató por la guerra de Gaza el año pasado, es un logro importante para Estados Unidos en los últimos días de la administración del presidente Joe Biden.
Es probable que el acuerdo permita a Israel centrarse más de cerca en el conflicto en la destrozada Gaza, donde ha prometido destruir a su antiguo enemigo, el grupo islamista palestino Hamás, que lideró los ataques del 7 de octubre de 2023 contra las comunidades israelíes.
«La fuerza debe dar paso al diálogo y a la negociación. Esto ya se ha conseguido en Líbano y debe suceder lo antes posible en la Franja de Gaza», declaró el ministro francés de Asuntos Exteriores, Jean-Noël Barrot, a la radio France Info.
Sami Abu Zuhri, funcionario de Hamas, dijo a Reuters que el grupo «aprecia» el derecho del Líbano a alcanzar un acuerdo que proteja a su pueblo y espera un acuerdo para poner fin a la guerra de Gaza .
Egipto, que junto con Estados Unidos y Qatar ha intentado sin éxito mediar un alto el fuego en Gaza, acogió con satisfacción la tregua en el Líbano.
Automóviles y furgonetas cargados de colchones, maletas e incluso muebles circulaban por la ciudad portuaria de Tiro, en el sur del país, que fue duramente bombardeada en los últimos días antes del alto el fuego, en dirección al sur. Los combates se habían intensificado en los últimos dos meses, obligando a cientos de miles de libaneses a abandonar sus hogares.
Israel dijo que su objetivo militar había sido asegurar el regreso seguro de unos 60.000 israelíes que huyeron de sus comunidades a lo largo de la frontera norte cuando Hezbolá comenzó a dispararles cohetes en apoyo de Hamás en Gaza.
En el Líbano, algunos coches ondeaban banderas nacionales, otros tocaban la bocina y se podía ver a una mujer haciendo el signo de la victoria con los dedos mientras la gente empezaba a regresar a sus casas de las que había huido.
Muchos de los pueblos a los que probablemente regresaban los habitantes habían sido destruidos, pero las familias desplazadas que alquilaban viviendas alternativas esperaban evitar pagar otro mes de alquiler, dijeron algunos de ellos a Reuters.
Hussam Arrout, un padre de cuatro hijos que dijo que fue desplazado de los suburbios del sur de Beirut pero originario de la aldea fronteriza meridional de Mays al-Jabal, dijo que estaba ansioso por regresar a su hogar ancestral.
«Los israelíes no se han retirado del todo, todavía están al borde del abismo. Por eso decidimos esperar hasta que el ejército anuncie que podemos entrar. Entonces pondremos en marcha los vehículos inmediatamente y nos dirigiremos al pueblo», explicó.
Cese permanente
Biden anunció el alto el fuego en la Casa Blanca el martes, poco después de que el gabinete de seguridad de Israel aprobara el acuerdo en una votación de 10 a 1. Dijo que había hablado con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y con el primer ministro interino del Líbano, Najib Mikati, y que los combates terminarían a las 4 am hora local (0200 GMT).
«Esto tiene como objetivo un cese permanente de las hostilidades», dijo Biden. «Lo que queda de Hezbolá y otras organizaciones terroristas no podrán volver a amenazar la seguridad de Israel».
Israel retirará gradualmente sus fuerzas durante 60 días mientras el ejército del Líbano toma el control del territorio cerca de su frontera con Israel para garantizar que Hezbolá no reconstruya su infraestructura allí después de una costosa guerra , dijo Biden.
Dijo que su administración también estaba presionando por un esquivo alto el fuego en Gaza y que era posible que Arabia Saudita e Israel pudieran normalizar las relaciones.
Hezbolá no ha comentado formalmente el alto el fuego, pero su alto funcionario Hassan Fadlallah dijo al canal de televisión libanés Al Jadeed que si bien apoyaba la extensión de la autoridad del estado libanés, el grupo emergería de la guerra más fuerte.
Israel ha asestado una serie de duros golpes a Hezbolá, el más notable de los cuales es el asesinato de su veterano líder, Hassan Nasrallah.
El ejército israelí dijo el miércoles que las fuerzas israelíes dispararon contra varios vehículos con sospechosos para evitar que llegaran a una zona prohibida en territorio libanés y los sospechosos se alejaron.
El ministro de Defensa, Israel Katz, dijo que dio instrucciones a los militares para que «actúen con firmeza y sin concesiones» si esto volviera a ocurrir.
Irán, que apoya a Hezbolá, al grupo palestino Hamás y a los rebeldes hutíes que han atacado a Israel desde Yemen, dijo que acogía con satisfacción el alto el fuego.
Netanyahu dijo que el alto el fuego permitiría a Israel centrarse en la amenaza de Irán, daría al ejército la oportunidad de descansar y reponer suministros y aislaría a Hamás.
Hezbolá estaba considerablemente más débil que al comienzo del conflicto, añadió Netanyahu.
«Los hemos hecho retroceder décadas. Hemos eliminado a Nasrallah, el eje del eje. Hemos eliminado a los principales líderes de la organización, hemos destruido la mayoría de sus cohetes y misiles», afirmó Netanyahu.
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